3/12/25

EVANGELIO JUEVES 04-12-2025 SAN MATEO 7, 21,24-37 PRIMERA SEMANA DE ADVIENTO

 





En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:
«No todo el que me dice “Señor, Señor” entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos.

El que escucha estas palabras mías y las pone en práctica se parece a aquel hombre prudente que edificó su casa sobre roca. Cayó la lluvia, se desbordaron los ríos, soplaron los vientos y descargaron contra la casa; pero no se hundió, porque estaba cimentada sobre roca.

El que escucha estas palabras mías y no las pone en práctica se parece a aquel hombre necio que edificó su casa sobre arena. Cayó la lluvia, se desbordaron los ríos, soplaron los vientos y rompieron contra la casa, y se derrumbó. Y su ruina fue grande».

                              Es palabra del Señor

REFLEXION

Una vez más vemos la profecía cumplida en el Evangelio. Jesús termina el Sermón de la Montaña con la comparación de las dos casas: una construida sobre arena y otra sobre roca.

No basta con escuchar las enseñanzas de Jesús, con decir: “Señor, Señor” y luego olvidarse –eso es edificar sobre arena-. Es preciso cumplir la voluntad de Dios, que no consiste en hacer muchas cosas, sino en fiarse de Dios y pasar por “su tamiz” todas nuestras relaciones. Es decir, preguntarse de vez en cuando: ¿Le gusta a Jesús el trato con esta persona o con estas amistades? ¿Le gusta mi manera de trabajar o mi modo de  de descansar? ¿Son de su agrado los libros que leo o las películas que veo?

No se trata de que el Señor se amolde a mis decisiones, sino de amoldarme yo a las suyas. Vendrán tormentas y tempestades, pero si mi casa está cimentada sobre roca, no perecerá. Dejemos que sea el Señor el que oriente nuestra vida.

 Monasterio Ntra. Sra. de la Piedad - MM. Dominicas

Monasterio Ntra. Sra. de la Piedad - MM. Dominicas
Palencia

Somos monjas dominicas. Nuestra comunidad está formada por 15 hermanas de tres países diferentes: España, Brasil y Paraguay. Con edades comprendidas entre los 30 y 100 años. Nuestro monasterio, fundado hace 500 años, se ubica frente a la plaza donde se encontraba la casa en la que vivió Santo Domingo de Guzmán en Palencia y frente al Convento de frailes dominicos que fundó él mismo, en su último viaje a España. Estamos unidas a la Santa Predicación por la oración y la penitencia. Cuidamos con esmero de la liturgia, escrutamos con corazón ardiente las Escrituras y estudiamos diligentemente la Verdad Sagrada. Nuestras puertas están siempre abiertas para que la gente comparta nuestra oración y silencio.