Presidida por nuestro párroco, Padre Misael, asistida por el diácono José Gárate y gracias a la tecnología, pudimos participar de la santa misa de hoy domingo 3 Mayo.
El domingo IV de Pascua, que hoy celebramos, es
conocido como el domingo del Buen Pastor. El evangelio nos presenta a
Jesucristo como el pastor que llama y reúne a sus ovejas, las conoce por su
nombre, las cuida, guía y conduce a frescos pastizales, busca a la oveja
perdida y, en su inmolación pascual, da la vida por sus ovejas, siendo al mismo
tiempo modelo y espejo de los pastores de la grey que Él adquirió con su sangre.
En este domingo celebramos también la Jornada
Mundial de Oración por las Vocaciones. En ella se nos recuerda que, en la tarea
salvadora que nace del misterio pascual, el Buen Pastor necesita colaboradores.
A través de humildes instrumentos humanos, el Señor ha de seguir predicando,
santificando, perdonando los pecados, sanando las heridas físicas y morales,
consolando a los tristes, enseñando a los ignorantes y acompañando a quien se
siente solo y abandonado. Son las distintas vocaciones que el Espíritu suscita
en su Iglesia para seguir cumpliendo la misión del Buen Pastor, viviendo como
Él en castidad, pobreza y obediencia, al servicio del Pueblo de Dios.