El Domingo de Resurrección o Domingo de gloria es la fiesta central del Cristianismo, en la que se conmemora, de acuerdo con los Evangelios Canónicos, la Resurrección de Jesucristo al tercer día después de haber sido crucificado y esto hace que adquiera sentido toda nuestra religión.
La Pascua marca el final de la Semana Santa y sigue un período de 50 días llamado Tiempo Pascual, el cual termina con el Domingo de Pentecostés.
Cuando celebramos la Resurrección de Cristo, estamos celebrando también nuestra propia liberación, celebramos la derrota del pecado y de la muerte. En la Resurrección encontramos la clave de la esperanza cristiana: "Si Jesús está vivo y está junto a nosotros, ¿qué podemos temer?, ¡qué nos puede preocupar?". San Pablo nos dice : "Si Cristo no hubiera Resucitado, vana sería nuestra Fe.".
Con el Domingo de Resurrección comienza el Tiempo Pascual, en el que recordamos el tiempo que Jesús permaneció con los apóstoles antes de subir a los cielos, durante la fiesta de la Ascensión.