30/7/25

EVANGELIO JUEVES 31-07-2025 SAN MATEO 13, 54-58 XVII SEMANA DEL TIEMPO ORDINARIO

 





En aquel tiempo, dijo Jesús al gentío:
«El reino de los cielos se parece también a la red que echan en el mar y recoge toda clase de peces: cuando está llena, la arrastran a la orilla, se sientan, y reúnen los buenos en cestos y los malos los tiran.

Lo mismo sucederá al final del tiempo: saldrán los ángeles, separarán a los malos de los buenos y los echarán al horno de fuego. Allí será el llanto y el rechinar de dientes.

¿Habéis entendido todo esto?»

Ellos le responden:
«Sí».

Él les dijo:
«Pues bien, un escriba que se ha hecho discípulo del reino de los cielos es como un padre de familia que va sacando de su tesoro lo nuevo y lo antiguo».

Cuando Jesús acabó estas parábolas, partió de allí.

                    Es palabra del Señor

REFLEXION

El evangelio de hoy nos narra tres secciones: una parábola, la conclusión del discurso parabólico de Mateo, y la firma del autor del Evangelio.

Jesús nunca define qué es el Reino, pero lo presenta con parábolas y con signos. Una parábola es una comparación a través de una narración con un fin didáctico. Se compara una realidad que no es fácil de explicar con palabras, con otra sencilla muy conocida para la gente. Generalmente, además de enseñar algo, la parábola invita a replantear una postura o una actitud.

En este caso se nos propone la parábola de la red inspirada en el hecho cotidiano y muy conocido para los oyentes de un pescador que echa la red y coge todo tipo de pescado. Sólo al llegar a la orilla hace una selección entre peces comestibles y no comestibles (cf. Lv 11,9-12).

La parábola invita a no hacer juicios precipitados ante las personas, tener paciencia incluso con aquellos no demasiado edificantes en la comunidad cristiana, pues el juicio final y definitivo está reservado exclusivamente a Dios.

La segunda parte del texto de hoy, la conclusión del discurso parabólico, está dirigida a los discípulos. Ellos en contraste con la gente, son aquellos que han comprendido las palabras de Jesús, tal vez porque su disposición interior está preparada para ello (cf.13,34-35). ¿Nosotros, discípulos de Jesús vamos abriendo nuestro corazón y nuestra mente al mensaje de Jesús para entenderlo?

Para finalizar tenemos la firma del autor del evangelio mostrando que él es un escriba que se ha hecho discípulo del Reino de los cielos, y actúa como un padre de familia que va sacando de su tesoro lo nuevo y lo antiguo, es decir, su manera de redactar el evangelio es a partir del Antiguo Testamento, lo antiguo; y la reinterpretación de Jesús de la Ley de Moisés y sus nuevas enseñanzas, lo nuevo.

Hoy celebramos la fiesta de San Ignacio de Loyola que tantas aportaciones hizo a la Iglesia, entre ellas, los Ejercicios Espirituales.

Hna. Mariela Martínez Higueras O.P.

Hna. Mariela Martínez Higueras O.P.
Congregación de Santo Domingo