5/11/25

EVANGELIO MIERCOLES 05-11-2025 SAN LUCAS 14, 25-33 XXXI SEMANA DEL TIEMPO ORDINARIO

 





En aquel tiempo, mucha gente acompañaba a Jesús; él se volvió y les dijo:
«Si alguno viene a mí y no pospone a su padre y a su madre, a su mujer y a sus hijos, a sus hermanos y a sus hermanas, e incluso a sí mismo, no puede ser discípulo mío.

Quien no carga con su cruz y viene en pos de mí, no puede ser discípulo mío.

Así, ¿quién de vosotros, si quiere construir una torre, no se sienta primero a calcular los gastos, a ver si tiene para terminarla?

No sea que, si echa los cimientos y no puede acabarla, se pongan a burlarse de él los que miran, diciendo:
“Este hombre empezó a construir y no pudo acabar”.

¿O qué rey, si va a dar la batalla a otro rey, no se sienta primero a deliberar si con diez mil hombres podrá salir al paso del que lo ataca con veinte mil?

Y si no, cuando el otro está todavía lejos, envía legados para pedir condiciones de paz.

Así pues, todo aquel de entre vosotros que no renuncia a todos sus bienes no puede ser discípulo mío».

                             Es palabra del Señor

REFLEXION

El Evangelio de este día es tremendamente exigente. Jesús llama al seguimiento radical tanto a sus discípulos como a las personas que acuden a verlo, a escucharlo. Es una llamada que exige la Cruz: llevarla y ser en ella crucificado y hacerlo sin mirar atrás, aunque implique dejar atrás mis afectos, las personas que tanto me quieren… Es más: hay que negarse a uno mismo, Como decía santa Ángela de la Cruz (cuya festividad celebramos hoy): “no ser, no querer ser, pisotear el yo”.

En conexión con el texto de la Carta de San Pablo, la Palabra de Jesús es exigente como toda la que proviene de Dios, pero nace ante todo y sobre todo del Amor. Porque el Amor es Servicio, total disponibilidad de mi persona por la causa de Dios, la causa del Reino. Como hemos explicado antes, no se trata tanto de renunciar como de elegir lo que el Señor me pide personalmente a mí, porque me conoce y me quiere y porque me quiere plenamente feliz.

Las parábolas que se proponen por parte de Jesús explicitan esta llamada y su respuesta: no se trata de una decisión apresurada o fruto de una repentina conmoción o entusiasmo. Es preciso sopesar los pros y los contras, mis verdaderas motivaciones, mis “talentos”, lo que es mi yo auténtico y no el egoísta y, desde la radicalidad (es decir, desde mis verdaderas convicciones despertadas por su Palabra), seguirle.

Es una llamada universal al discipulado. Ser cristiano, cada uno con su personalidad y sus circunstancias, implica decirle que sí sin condiciones al Señor que por Amor me invita a tomar su cruz, que es también la nuestra.

D. Carlos José Romero Mensaque, O.P.

D. Carlos José Romero Mensaque, O.P.
Fraternidad “Amigos de Dios” de Bormujos (Sevilla)

Formo parte del laicado dominicano desde 2006 motivado por el estudio y devoción al Santo Rosario y el ejemplo de dos frailes. Soy doctor en Historia y en Artes y Humanidades (Teología) y tengo estudios teológicos como profesor de Religión que continúo. Mi actividad como predicador se centra en el estudio de la Historia de la Orden, la catequesis parroquial y la dirección de un programa semanal sobre el Evangelio en YouTube.