26/5/23

EVANGELIO SABADO 27-05-2023 SAN JUAN 21, 20-25 SEPTIMA SEMANA DE PASCUA

 





En aquel tiempo, Pedro, volviéndose, vio que los seguía el discípulo a quien Jesús amaba, el mismo que en la cena se había apoyado en su pecho y le había preguntado: «Señor, ¿quién es el que te va a entregar?»
Al verlo, Pedro dice a Jesús:
«Señor, y éste, ¿qué?»
Jesús le contesta:
«Si quiero que se quede hasta que yo venga, ¿a ti qué? Tú sígueme.»
Entonces se empezó a correr entre los hermanos el rumor de que ese discípulo no moriría. Pero no le dijo Jesús que no moriría, sino: «Si quiero que se quede hasta que yo venga, ¿a ti qué?»
Este es el discípulo que da testimonio de todo esto y lo ha escrito; y nosotros sabemos que su testimonio es verdadero.
Muchas otras cosas hizo Jesús. Si se escribieran una por una, pienso que ni el mundo podría contener los libros que habría que escribir.

                            Es palabra de Dios

REFLEXION

Final del evangelio de Juan. Este pasaje es una invitación a centrarnos en el seguimiento de Cristo, para ser, pensar, sentir y actuar como Jesús.  La curiosidad de Pedro, aunque pueda ser comprensible, por mostrar preocupación por el otro discípulo tan querido para Jesús, no es admitida por el Maestro, porque no se puede poner la mano en el arado y mirar para atrás. El asunto es mirarlo todo como lo mira él y desde él. Eso es lo que se espera del discípulo y lo contrario es lo que no acepta el Señor. La respuesta oportuna a la inoportuna curiosidad es: “Si quiero que se quede hasta que yo venga, ¿a ti qué?”. No es asunto tuyo. Tú, sígueme. Haz tú lo que te toca hacer a ti.

Suele ocurrir que pretendemos llevar a los otros a Cristo organizándoles la vida, programándolos y de esa manera, ni ellos ni nosotros nos centramos en él.

Lo que procede es llevar a cabo la plena configuración con Jesús y ésta es obra del Espíritu que sostendrá y acrecentará el deseo y el cumplimiento del mismo. Cuando Jesús en la cena pascual está hablando con los apóstoles, señala cuál es el modo correcto de proceder. Así como él va a preparar un lugar para ellos, de la misma manera, los seguidores de Jesús, serán el reclamo y al mismo tiempo el testimonio del modo de proceder con los otros. Invitarlos a seguir al Señor. Ven y verás por ti mismo.

La preocupación por la suerte de la humanidad no puede desvincularse del seguimiento de Cristo. No se trata de buscar vías alternativas, sino recordar que él es “el Camino, la Verdad y la Vida”. Y así se muestra que el don de la vida entregada por el Señor, es para todos los hombres y esta invitación al seguimiento se ofrece a todos los seres humanos.

Será bueno que, en esta final de la Pascua, tengamos un tiempo para recapitular lo escuchado a lo largo de la cincuentena pascual y destacar para trabajar sobre ello, lo que precisa en nosotros una reconsideración y correcta aplicación.

¿Cómo escucho?

¿Qué busco al seguir a Jesús?

Fr. Antonio Bueno Espinar O.P.
Convento de Santa Cruz la Real (Granada)