20/11/25

EVANGELIO VIERNES 21-11-2025 SAN LUCAS 20, 27-40 XXXIII SEMANA DEL TIEMPO ORDINARIO

 





En aquel tiempo, Jesús entró en el templo y se puso a echar a los vendedores, diciéndoles:
«Escrito está: “Mi casa será casa de oración”; pero vosotros la habéis hecho una “cueva de bandidos”».

Todos los días enseñaba en el templo.

Por su parte, los sumos sacerdotes, los escribas y los principales del pueblo buscaban acabar con él, pero no sabían qué hacer, porque todo el pueblo estaba pendiente de él, escuchándolo.

                        Es palabra del Señor

REFLEXION

La luz del Nuevo Testamento ayuda a desvelar lo antiguamente revelado. Jesús es el templo de Dios en medio del mundo y para el mundo. Él ha purificado y purifica del mal que representa el pecado, los destructores y vendedores de lo consagrado al culto y alabanza de Dios. Estos últimos, en concreto, son los que profanan lo espiritual con su compraventa, es decir, lo que Dios ofrece y otorga gratuitamente en beneficio de todos. Ninguna persona humana puede arrogarse el señorío sobre lo espiritual. Es Cristo, templo del Dios vivo, el que dignifica la casa a la que todos están llamados y la ha convertido en «casa de oración», comenzando por el templo de su Madre María.

Cierto que no puede reducirse la «casa de oración» a construcciones materiales, aunque estas sean necesarias y han de mantenerse con el debido decoro. Jesús usó el templo de Jerusalén para la enseñanza de las verdades de Dios y mantenía a la gente pendiente de él y escuchándolo de corazón.

El Señor, templo espiritual, está vivo en su asamblea eclesial que precisa de espacios para ofrecer el sacrificio de Cristo y recibirlo en comunión, para la escucha de su palabra, meditación de sus enseñanzas, para orar de tantos modos, derramar los sentimientos, alimentar la vida, celebrar los sacramentos y tantas otras festividades. Pero hay que trascender siempre, de los signos, hasta llegar a lo significado por ellos, hasta las verdades en toda su hondura que transmite nuestra fe.

Fray Vito T. Gómez García O.P.

Fray Vito T. Gómez García O.P.
Convento de Ntro. Padre Sto. Domingo (Torrent)

Soy fraile dominico y me he especializado en teología e historia de la Iglesia. He sido docente en la Facultad de Teología San Vicente Ferrer de Valencia y he impartido cursillos, ejercicios espirituales y conferencias en diferentes países de Latinoamérica, Filipinas e Italia. Durante doce años fuí postulador de las causas de canonización de la Orden de Predicadores. Aunque estoy destinado en el convento de Santo Tomás, Sevilla, actualmente presto servicio en el convento de Santo Domingo, Torrente – Valencia. He nacido en las inmediaciones de los Picos de Europa (León), y siempre me ha gustado subir montañas, especialmente en León y Cataluña.