Es palabra de Dios
REFLEXION
Juan, sitúa a Jesús de Nazaret en camino, iniciando su misión. Su presencia no deja indiferente a nadie. “¿Qué buscas?”
Todas las personas, en algún momento de su la vida, se plantean interrogantes y preguntas, pues muchas son las encrucijadas que encuentran y tienen que ir dando respuestas. ¿Qué busco? ¿Dónde puedo encontrar una referencia, un ideal que guie y de sentido a mi vida?
Para los primeros discípulos y para algunos seguidores de Juan el Bautista lo encuentran en Jesús de Nazaret: el Maestro, el Rabí, el Mesías esperado. Es tal el impacto que les produce que nos dejaron por escrito la hora del encuentro: “Eran las cuatro de la tarde”. Hay encuentros en la vida que marcan, dejan huellas y te transforman.
No menos comprometido es hacer la pregunta: “¿Dónde moras?”. Ella lleva a grandes desafíos, a nuevos horizontes. Nos conduce a “su casa”, a la Sinagoga de Nazaret donde expone su proyecto de vida: “Yo vine para que todos tengan vida y vida en abundancia”. Estas palabras van dirigidas a ti y a mí en este momento de nuestra historia
Porque “Yo,
-tuve hambre y me disteis de comer
-era emigrante y me acogisteis
-vivía en guerra y os manifestasteis por la paz.
-…….”