Es palabra de Dios
REFLEXION
Este pasaje, narrado por Mateo, está dentro del sermón del Monte. Como un nuevo Moisés trata de enseñar a sus discípulos y al pueblo en general, e introduce algo fundamental para San Mateo: cómo la justicia de Dios es realizada por Jesús para cumplir su plan de Dios, su voluntad.
La justicia: plan de Dios realizado por Jesús, es una palabra fundamental en Mateo. Es todo, abarca la globalidad, abarca la voluntad de Dios, la misión de Jesús, sus órdenes. Éste se convierte en un modo de ser justo. Tenemos peligro de hacer que su concepto de justicia se haga a nuestro nivel. La justicia, como su Gracia y bondad es desmedida, injusta para nosotros. Recodamos algunos pasajes de este evangelista.
José, para San Mateo, porque era justo, lo apunta en el Evangelio con un punto más de Misericordia, un plus de compasión, que todo se sustanciaba en ese plus. A ese plus solo llegan los imprescindibles. Otro ejemplo: la parábola de los viñadores a la viña: da a todos un denario. Independientemente de lo que hayan trabajado. Nos cuesta entender esta justicia.
La justicia de Dios supera con creces la justicia humana. La justicia de Dios no tiene nada que ver con la humana, pero a su vez nos hace experimentarnos niños y modestos espirituales. Esto nos lleva a mirar a Dios con Gracia y a los demás con respeto y solidaridad. Porque si nos sentimos muy buenos, tendemos a mirar al otro con superioridad y soberbia.
Modestia frente a la soberbia espiritual. La Misericordia de Dios viene a mejorar la justicia humana: cada vez, por una vez... La parábola tuve hambre y me disteis...está para que nos fijemos en la identificación de Jesús con los más pequeños. Jesús es el más pequeño. Esta es una Justicia que nos desarbola. El enemigo de la fe es el miedo, no el ateísmo. La justicia que da Dios es sobreabundante. Desmesura bien, sin medirlo.