Es palabra del Señor
REFLEXION
Una vez más los fariseos interrogan a Jesús, en este caso sobre la venida del Reino de Dios. Como muchos judíos de la época esperaban un mesías victorioso, más guerrero que otra cosa. Y la respuesta que reciben no puede ser más contundente: El Reino está dentro de vosotros, porque no es un reino terrenal, algo que no todos entendían. Incluso tuvo que explicárselo a sus discípulos en varias ocasiones.
La importancia de interiorizar el mensaje de Cristo es fundamental. Nuestro corazón debe ser receptivo, abierto a las cosas de Dios, solo así podremos sentir que el Reino está aquí, con nosotros. Solo desde dentro podemos colaborar en la misión de implantar el Reino de Dios en la tierra. Para eso tenemos que aprender a descubrirlo mediante la oración y la contemplación, mirando a nuestro interior para darnos cuenta de que verdaderamente somos templos del Espíritu Santo. Y el Reino irá acampando en las almas de todos y cada uno de nosotros, sin necesidad de grandes manifestaciones, íntimamente y sin ruido. Luego nosotros debemos darlo a conocer a los demás como hicieron los primeros cristianos: mediante la palabra, las obras y el ejemplo.
Una vez más anuncia Jesús a los Discípulos que el Hijo del Hombre habrá de padecer, dando a entender que la vendida del Reino no es fácil. Y también les avisa de las falsas llamadas. Hoy se nos acercan muchos falsos profetas prometiendo un mundo feliz (dinero, sexo, placeres mundanos…) pero si llevamos interiorizado el mensaje de Cristo, si nos hemos abierto a la fuerza del Espíritu Santo, sabremos que el Reino está en nosotros y nadie nos podrá engañar con cantos de sirenas. Una Fe enraizada en el alma es la mejor garantía de que algún día estaremos con el Maestro y viviremos la plenitud del Reino de Dios.