25/11/24

EVANGELIO MARTES 26-11-2024 SAN LUCAS 21, 5-11 XXXIV SEMANA DEL TIEMPO ORDINARIO

 





En aquel tiempo, como algunos hablaban del templo, de lo bellamente adornado que estaba con piedra de calidad y exvotos, Jesús les dijo:
«Esto que contempláis, llegarán días en que no quedará piedra sobre piedra que no sea destruida».
Ellos le preguntaron:
«Maestro, ¿cuándo va a ser eso?, ¿y cuál será la señal de que todo eso está para suceder?».
Él dijo:
«Mirad que nadie os engañe. Porque muchos vendrán en mi nombre diciendo: “Yo soy”, o bien: “Está llegando el tiempo”; no vayáis tras ellos. Cuando oigáis noticias de guerras y de revoluciones, no tengáis pánico. Porque es necesario que eso ocurra primero, pero el fin no será enseguida».
Entonces les decía:
«Se alzará pueblo contra pueblo y reino contra reino, habrá grandes terremotos, y en diversos países, hambres y pestes. Habrá también fenómenos espantosos y grandes signos en el cielo».

                                   Es palabra del Señor

REFLEXION

Jesús oye hablar del esplendor del Templo y declara a sus discípulos: “Esto que contempláis llegará un día en que no quedará piedra sobre piedra. ¡Todo será destruido!”.

Los discípulos asombrados le preguntan: “Maestro, ¿cuándo será todo eso? ¿Cuál será la señal de que esas cosas están a punto de suceder?”. Y, Jesús, reorienta la preocupación de los discípulos hacia la actitud existencial de compromiso y esperanza vigilante con la cual hay que vivir en el presente.

El final histórico del Templo, es símbolo del final de toda la historia ante el que Jesús advierte: que nos os engañen los falsos mesías que quieren suplantarle diciendo: “yo soy o el tiempo está cerca”. No vayáis tras ellos. Ante rumores de guerras y revoluciones: no tengáis pánico; estos eventos están bajo el control de Dios, no son todavía los signos que indican que la historia está llegando a su fin.

Jesús menciona conflictos étnicos y nacionales, calamidades naturales y grandes señales en el cielo, que en la tradición apocalíptica son símbolo y revelan la intervención de Dios en la historia, en relación con el juicio divino, la justicia de Dios sobre la humanidad.

Enseñanzas de este Evangelio: No somos dueños de la vida: habrá un final; muerte

Dios intervendrá en nuestra historia llevándola a su fin: juicio,

Tu modo de vivir hoy decide tu futuro: infierno o gloria.

No tengas pánico, no te dejes engañar por los falsos profetas y agoreros del fin; “porque Dios no ha enviado a su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para que el mundo se salve por El”. Jn 3,17.

Fr. Isidoro Crespo Ganuza O.P.
Convento de S. Valentín de Berrio Ochoa (Villava)