Es palabra del Señor
REFLEXION
El Señor se queja de los delitos de su pueblo. No practican la justicia, abandonan el mandato de Dios. No ayunan ni se mortifican porque creen que Dios no les hace caso. El día del ayuno buscan su interés y apremiáis a vuestros servidores, incluso ayunan entre riñas y disputas. El Señor les pide que cambien de conducta y les indica el ayuno que desea: que abran las prisiones injustas, que hagan saltar los cerrojos de los cepos, que dejen libres a los oprimidos, que partan el pan con el hambriento y hospeden a los pobres sin techo, vistan al desnudo.
De esta manera el Señor les escuchará. “Entonces clamarás al Señor y te responderá, gritarás y te dirá: Aquí estoy. Porque yo, el Señor, tu Dios, soy misericordioso”.
El Señor siempre tiene en cuenta nuestras buenas acciones.
¿Es que pueden guardar luto los amigos del novio?
Los discípulos de Juan interrogan a Jesús sobre el ayuno, que ellos y los fariseos practican. Sin embargo, los discípulos de Jesús no ayunan.
La respuesta de Jesús es clara. Los amigos del novio, mientras esté el novio -que es el mismo Jesús- con ellos no pueden ayunar. Ya vendrán tiempos, cuando se lleven al novio que ayunarán.
Los cristianos del siglo XXI, que siempre tenemos a Jesús con nosotros… “Yo estaré siempre con vosotros”, lo que debemos hacer es imitar a Jesús. Vivir como él vivió. Este es nuestro camino constante. No hay otro camino mejor.