Es palabra del Señor
REFLEXION
Jesús acaba de descubrir ante el pueblo la infidelidad, la no correspondencia a sus dones, su entrega, su predilección por ellos, “el pueblo escogido”, podríamos decir que se siente defraudado, un poco rendido ante la evidencia de no encontrar respuesta, tras haber mostrado y realizado su dedicación y entrega…. Y “en aquel momento” … como elevando el espíritu, como aterrizando en la única Verdad, en la fuente y origen de toda su obra… se dirige al Padre, su Padre, el origen, guía y meta de nuestra salvación y de todo lo que existe… el Padre, que es Quien le ha metido en este ´berenjenal`, y a Él acude. Se percibe cómo es su relación, su comunicación propia, la más excelsa y habitual: “Padre, te doy gracias”. Jesús es consciente de su postura de Hijo y lo reconoce desde su Humanidad, en la que expone la necesidad de los humanos que le han sido confiados. Jesús da gracias al Padre porque su obra es firme, su voluntad tiene un camino muy concreto y cierto y Él, en su oración, vuelve a recordar o activar esta verdad, precisamente porque no ve el fruto e insiste con reiteración en la humildad, pequeñez y pobreza necesarias para recibir el privilegio de la auténtica Sabiduría. Jesús se reconoce el privilegiado por excelencia: “todo me ha sido entregado por mi Padre” … y a la vez se reconoce como el Camino hacia Él, el puente (pontífice), revelando su estrecha unión y su Unidad indivisible Se deja entrever cómo Jesús nos enseña la manera de actuar y sobrevivir cuando el entorno, la sociedad, los otros… no reconocen la verdad, ´no hacen caso` y podemos correr el riesgo del desánimo o la desilusión ¡no! Por experiencia sabemos que entonces, en aquel momento toca volverse al Padre, exponerle la realidad, la pobreza, el fracaso aparente, aún el pecado, y acoger Su Misericordia, reactivando su Verdad y poniendo en Él la Confianza, toca dejar en su Presencia lo nuestro y retornar fortalecidos a recorrer el Camino. Al fin la relación y Encuentro con el Padre, con su voluntad y auxilio es personal para cada uno. ¿Cómo puedes resolver las contrariedades producidas por la incongruencia, irregularidad, decadencia de tantos que nos rodean? |