10/2/25

EVANGELIO MARTES 11-02-2025 SAN MARCOS 7. 1-13 V SEMANA DEL TIEMPO ORDINARIO

 





En aquel tiempo, se reunieron junto a Jesús los fariseos y algunos escribas venidos de Jerusalén; y vieron que algunos discípulos comían con manos impuras, es decir, sin lavarse las manos. (Pues los fariseos, como los demás judíos, no comen sin lavarse antes las manos, restregando bien, aferrándose a la tradición de sus mayores, y al volver de la plaza no comen sin lavarse antes, y se aferran a otras muchas tradiciones, de lavar vasos, jarras y ollas).

Y los fariseos y los escribas le preguntaron:
«Por qué no caminan tus discípulos según las tradiciones de los mayores y comen el pan con manos impuras?».

Él les contestó:
«Bien profetizó Isaías de vosotros, hipócritas, como está escrito: “Este pueblo me honra con los labios, pero su corazón está lejos de mí. El culto que me dan está vacío, porque la doctrina que enseñan son preceptos humanos”. Dejáis a un lado el mandamiento de Dios para aferraros a la tradición de los hombres».

Y añadió:
«Anuláis el mandamiento de Dios por mantener vuestra tradición. Moisés dijo: “Honra a tu padre y a tu madre” y “el que maldiga a su padre o a su madre es reo de muerte”. Pero vosotros decís: “Si uno le dice al padre o a la madre: los bienes con que podría ayudarte son ‘corbán’, es decir, ofrenda sagrada”, ya no le permitís hacer nada por su padre o por su madre; invalidando la palabra de Dios con esa tradición que os transmitís; y hacéis otras muchas cosas semejantes».

                    Es palabra del Señor

REFLEXION

En no pocas ocasiones la tradición se coloca por encima de la fe, de la alabanza y de la bendición de Dios. Incluso en la sociedad secular se entrecruzan tradiciones que, sin arraigo en el pueblo, se alimentan justificando con alusiones a un ámbito cultual más antiguo respecto a la cultura cristiana.

Estas alusiones pretenden ser una pseudo-cultura efímera, ya que sólo se remite a ella cuando se quiere rechazar la cultura cristiana. Una vez hecha la alusión o la referencia, queda relegada al olvido. No permanece en la memoria de un pueblo.

No ocurre lo mismo con la cultura judía o cristiana. Aunque con orientaciones diferentes, son religiones que alimentan tradiciones muy antiguas arraigadas en el corazón del hombre.

Jesús, el Cristo, vive en una cultura judía y se refiere a las tradiciones antiguas como la tradición de nuestros padres. Muchos fariseos imponen tales tradiciones sustituyendo a Dios. Las tradiciones no caminan solas. Tienen un origen, un desarrollo y un declive en el corazón creyente del ser humano.

En un diálogo directo con sus congéneres les hace ver que mantienen un culto vacío a tradiciones que ya no tienen sentido si no avivan el amor y el verdadero encuentro con Dios. Si una tradición sustituye a Dios, o es puesta por encima de Dios, se convierte en un culto vacío sin contenido. Porque ya no tiene un verdadero y sincero arraigo en Dios.

¿De qué sirve la limpieza, o el sacramento de la reconciliación, como prácticas sacramentales y sagradas, si no alimenta el amor a mi hermano? Cuando vaciamos la fe del contenido del amor estamos practicando una religión sin Dios. Un culto vacío. Jesús impregnó cada palabra, cada gesto milagroso de la misericordia y compasión de Dios. No podemos caminar a ciegas sin el contenido de la fe. Puesto que estaremos dando tumbos sin un rumbo claro en el seguimiento de Cristo.

Fray Alexis González de León O.P.
Convento de San Pablo y San Gregorio (Valladolid)