En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:
«No se turbe vuestro corazón, creed en Dios y creed también en mí. En la casa de mi Padre hay muchas moradas; si no, os lo habría dicho, porque me voy a prepararos un lugar. Cuando vaya y os prepare un lugar, volveré y os llevaré conmigo, para que donde estoy yo estéis también vosotros. Y adonde yo voy, ya sabéis el camino».
Tomás le dice:
«Señor, no sabemos adónde vas, ¿cómo podemos saber el camino?».
Jesús le responde:
«Yo soy el camino y la verdad y la vida. Nadie va al Padre sino por mí».
Es palabra del Señor
REFLEXION
Ante la ida de Dios a la casa del Padre y el dolor de sus discípulos por ello, Jesús les quiere consolar. “No perdáis la calma: creed en Dios y creed también en mí. En la casa de mi Padre hay muchas estancias, y me voy a preparaos sitio. Cuando vaya y os prepare sitio, volveré y os llevaré conmigo, para que donde estoy yo, estéis también vosotros. Y adonde yo voy ya sabéis el camino”. Con toda rotundidad Jesús nos dice: “Yo soy el camino, la verdad y la vida. Nadie va al Padre, sino por mí”. Lo nuestro es estar siempre unidos amorosamente a Jesús.