En aquel tiempo,
mientras Jesús hablaba a la gente, una mujer de entre el gentío, levantando la
voz, le dijo:
«Bienaventurado el vientre que te llevó y los pechos que te criaron».
Pero él dijo:
«Mejor, bienaventurados los que escuchan la palabra de Dios y la cumplen».
Es palabra del Señor
REFLEXION
Jesús no la
desdice, sino que permuta la bienaventuranza en plural y la eleva a un plano
superior a través del adjetivo mejor, «los que escuchan la Palabra de
Dios y la cumplen» (v. 28).
Contemplación y acción: Maridaje
perfecto en clave cristiana. Se reclaman mutuamente. De ir por libre, la
ecuación no se resuelve.
Palabra escuchada,
no oída, matizando en ello la atención a la misma y como respuesta la obediencia
a ésta. Fue el programa de vida de María, la madre de Jesús, el Cristo; y
debiera ser el tuyo, el mío, el de todo el linaje humano.
«Bienaventurada
la que ha creído, porque lo que le ha dicho el Señor se cumplirá» (Lc. 1,45) fue el elogio
que María escuchó por boca de Isabel en su visita a ésta.
- Esperanza Aquí
y Ahora
- Alegría porque
Dios es Dios
- Regalados por la Palabra… fidelidad a la misma.
Sor Mª Ángeles Calleja O.P.
Monasterio Santa Catalina – Paterna