Es
palabra del Señor
REFLEXION
Este texto
tan conocido del Evangelio de Lucas es la perfecta culminación de la profecía
del Emmanuel. La Virgen María es la doncella humilde que espera con fe
inquebrantable la Promesa mesiánica. Pero no en ella, por ella...Y duda y
objeta, pero finalmente acepta y en y con ella cada uno de nosotros, el nuevo
Israel, la Iglesia.
María es
ciertamente el paradigma de este tiempo de Adviento. Ella vive en Esperanza el
tiempo definitivo de Dios que le otorga su Gracia y la hace fecunda. Ella
experimenta igualmente una singular Alegría porque Dios no ha olvidado a su
pueblo y quiere compartir en ella y para nosotros una Vida Humana y Divina. Y
ante todo, el Amor de un Dios Todopoderoso que por el Espíritu se hace
entrañable criatura que de ella necesita para vivir y crecer, para amar como
aman los hombres.
En María y
con Ella nos sentimos bendecidos en este tiempo de Adviento y esperamos la
Navidad en Belén y en nuestros hogares. Tenemos que agradecer profundamente que
el Señor de Cielos y Tierras no solo nos visite, sino que venga para quedarse.
Y para ello necesita de cada uno de nosotros, de que le acojamos no solo a
través de las tradiciones entrañables de los encuentros iluminados, sino en los
demás hombres, especialmente los que más le y nos necesiten para Vivir.
D. Carlos
José Romero Mensaque, O.P.
Fraternidad “Amigos de Dios” de Bormujos (Sevilla)